Que el videojuego de moda #fortnite no es la mejor opción de esparcimiento para nuestros hijos, no os lo voy a descubrir yo hoy en este artículo. Pero que como padres y tutores somos los máximos responsables de la educación, formación y desarrollo integral de nuestros hijos, sí me voy a permitir crear una analogía.

Tenemos, casi, la obligación, me atrevería a decir, de ir por delante de los nuevos retos, por no llamarlo “zancadillas” que nos va a ir planteando la sociedad en la que vivimos. Y no podemos relajarnos a la vaga idea de que ”la culpa es de los demás “que vaya juegos que diseñan” o “que todos los niños los juegan”… Excusitas baratas amigos lectores.
Desde el minuto uno que decidimos ser padres, nos colocamos en la cabecera de una avanzadilla, pero no como caballeros de reluciente armadura a lomos de un grácil corcel. No. Somos los peones del ajedrez, los zapadores de un combate, los #constructores. Los que salimos a explorar el escenario y saber qué nos rodea; adelantándonos para ir construyendo las estructuras, allanando el terreno, ofreciendo un panorama a nuestros hijos que les permita ser críticos y poder tomar decisiones.
Como todo #héroe, necesitan compañeros, guías, orientadores. Nos necesitan. A lo mejor no podemos evitar que jueguen, pero sí podemos poner unos horarios, dosificar los tiempos, incluso compartir con ellos otros juegos (@quejuego #juegosdemesa @asmodee) para que conozcan otras alternativas y aprecien nuestro refuerzo en positivo.
UpGrow by Genoveva Díaz